El Metaverso Centralizado es una Herramienta para la Tecnocracia
No pretendo desincentivar el uso de la tecnología, sino informar sobre sus contraindicaciones. Todo exceso tiende a ser nocivo.
Este artículo es una mirada de advertencia.
El metaverso es un entorno donde los humanos interactúan social y económicamente como avatares, a través de un soporte informático en un ciberespacio, y generalmente está compuesto por múltiples espacios virtuales tridimensionales, compartidos.
El metaverso actúa como una metáfora del mundo real, y con nuevas relaciones y normas económicas exclusivas dentro del ecosistema, y que muchas de ellas no son aplicables a nuestra realidad física.
Una metáfora de ciencia ficción que hoy es posible, y donde la realidad supera la ficción.
La Realidad Supera la Ficción
EL GRAN HERMANO TE VIGILA, narraba George Orwell en su obra “1984”, publicada en 1949, que describe una sociedad global de control total en la que no se permite a la gente tener pensamientos que discrepen del estado corporativo. La libertad individual no existe y la tecnología avanzada se ha convertido en el motor de la sociedad de la vigilancia. Los soplones y las cámaras están por todas partes. Y la gente está sometida a la Policía del Pensamiento, que se ocupa de los culpables de delitos de pensamiento.
En The Matrix, la conocida película de ciencia ficción, el programador informático Thomas Anderson, alias Neo, es despertado de un sueño virtual por Morfeo, un luchador por la libertad que pretende liberar a la humanidad de un estado de hibernación de por vida, impuesto por máquinas con inteligencia artificial hiperavanzadas, que dependen de los humanos como fuente de energía orgánica. Con sus mentes conectadas a una realidad virtual perfectamente diseñada, pocos humanos se dan cuenta que están viviendo en un mundo de sueños artificial.
Neo tiene que elegir: tomar la píldora roja, despertar y unirse a la resistencia, o tomar la píldora azul, y seguir inmerso en su mundo virtual manteniendo los poderes fácticos. La mayoría de la gente opta por la píldora azul.
La actualidad nos muestra que la píldora azul es un billete único para una cadena perpetua en un campo de concentración tecnológico, y que ha sido recubierta por la miel de la usabilidad para enmascarar el amargo gusto.
Nos han entregado la píldora azul a través de Internet superrápido, streaming 24/7, señales de telefonía móvil que nunca pierden una llamada, termostatos que nos mantienen a la temperatura ideal sin que tengamos que mover un dedo y entretenimiento que puede transmitirse simultáneamente a nuestros televisores, tabletas y teléfonos móviles, y luego dispositivos domésticos.
En un futuro cercano, con un chip en nuestro cuerpo. Big Data es poder central. Fact Check: quantum dot dye technology does not feature microchips.
Lo vimos en la última “pandemia” (Covid19), el miedo genera poder para quien lo infunde, y riqueza…
El encierro de nuestra libertades físicas individuales es parte del experimento del metaverso.
Sin embargo, no sólo estamos en manos de estas tecnologías que estaban destinadas para facilitarnos la vida, sino que nos hemos convertido en sus esclavos.
Mira a tu alrededor. Se mire por donde se mire, la gente es tan adicta a sus dispositivos con pantalla conectada a Internet- smartphones, tabletas, ordenadores, televisores- que pueden pasar horas inmersos en un mundo virtual donde la interacción humana se filtra a través de la tecnología.
¿Es eso libertad?, no, ni siquiera es progreso, sino involución hacia el transhumanismo. Es la tiranía tecnológica y el control férreo ejercido mediante el estado de vigilancia, por los gigantes corporativos como Google y Facebook, y las agencias de espionaje gubernamentales como la Agencia de Seguridad Nacional, o cualquier otra organización similar de cualquier país.
Estamos tan absorbidos por las últimas tecnologías que apenas hemos pensado en las ramificaciones de nuestra huida hacia adelante, a un mundo donde nuestra dependencia abyecta a los aparatos y artilugios conectados a Internet, nos preparan para un futuro donde la libertad es una ilusión.
El proyecto MK Ultra de la CIA pretendió durante la segunda mitad del siglo pasado, entre los años cincuenta y setenta, conseguir el control mental a través de todo tipo de actividades ilegales: LSD, hipnosis, terapia electroconvulsiva, torturas. En total, colaboraron con los 149 proyectos del programa casi doscientos investigadores de ochenta instituciones.
Entonces no existían Facebook o Google, claro.
Los Datos del Metarverso Prometen un Negocio Millonario
La empresa de Mark Zuckerberg, actualmente cuenta con 2.900 millones de personas entre WhatsApp, Instagram o la propia Facebook (fuente Statista), y en crecimiento.
Cada vez más, los niños, adolescentes y jóvenes (y muchos adultos), pasan muchas horas conectados a plataformas de internet en las que no solo juegan, sino que interactúan con otras personas.
Pero el metaverso no se queda solo en los juegos electrónicos. Para Zuckerberg, el empujón al metaverso vendrá de la fusión de los mundos digital y físico. En lugar de consumir internet a través de pantallas de móvil, al metaverso se accederá a través de gafas de realidad virtual o realidad aumentada de alta tecnología, que proyectarán imágenes realistas e interactivas sobre nuestro entorno físico.
El viernes 29 de octubre de 2021, Mark Zuckerberg anunció la conversión de su empresa Facebook en META, que su slogan dice: “The metaverse will be social”
Pero el GRAN HERMANO es mucho más que Facebook y las denuncias de malas prácticas sobre privacidad de datos personales de sus usuarios, que también afectan a otros gigantes tecnológicos, como Google.
La gratuidad del servicio, nos lleva a que nosotros mismos somos el producto. No hay almuerzos gratis. ¿Has oído hablar del Big Data? (grandes flujos de información que son útiles para predecir comportamientos).
El Poder de la Tecnocracia
“No tendrás nada y serás feliz. Cualquier cosa que quieras alquilar, te la llevará un dron a casa”, es la primera de las 8 predictions for the world in 2030 del World Economic Forum.
El Establishment político ha entendido el poder de esa tecnología. La Tecnocracia es un camino que estamos recorriendo.
La gobernanza no solo está asentada en el poder político tradicional, sino que a través de las empresas, donde la tecnocracia toma forma con la Corporatocracia, ya que de otra manera no se podría implementar.
Las empresas estadounidenses no son las únicas que quieren formar parte del metaverso y así, del poder económico. Varias empresas chinas, como Tencent, Netease y Baidu, también están interesándose.
En BlackRock y Fidelity (dos grandes fondos globales de inversión ) tienen claro que el metaverso es una oportunidad tan interesante, como lo fue hace 20 años, apostar por compañías como Google o Facebook.
“Los ricos invierten en tiempo, los pobres invierten en dinero”. Warren Buffett
Basta con realizar una búsqueda en Google sobre un tipo de comida, zapatos, coches o libros, para que los siguientes anuncios tengan esta temática. La invasión a la privacidad comienza a partir de recolección de datos cuando navegamos. Pero también basta que el GRAN HERMANO conozca nuestros gustos, miedos y debilidades para que nos envíen las noticias falsas (o diseñadas) para que, por ejemplo, nos conduzcan a votar a un candidato determinado. Eso es parte de la Tecnocracia.
Así, el concepto de metaverso, es utilizado de forma global para describir a una vida digital paralela a la vida real, pero en el caso de los proyectos criptográficos, el metaverso va un poco más allá.
Blockchain Metaverse
La criptoeconomía es un ecosistema nuevo, pero creciente de forma acelerada. Las personas interactúan en él sin necesidad de permiso, sin necesidad de confianza. El entorno adecuado para el metaverso.
Un metaverso blockchain es un universo virtual, formado por espacios virtuales 3D compartidos, generados dentro de una cadena de bloques.
En ese universo virtual existe una economía propia, acciones que simulan ser trabajos, una moneda propia, activos digitales, avatares y numerosas oportunidades de monetización.
El metaverso en blockchain crea una vida paralela completa, porque a los roles sociales les agrega economía.
Decentraland es el espacio más popular entre los metaversos blockchain basados en la cadena de bloques Ethereum. En Decentraland, puedes comprar bienes virtuales conocidos como LAND que se almacenan en la cadena de bloques Ethereum en forma de token no fungible (NFT).
Para obtener tu propio lote de TIERRA en Decentraland, debes obtener la criptomoneda fungible ERC-20 de Decentraland, denominada MANA.
Pavia, es el primer proyecto metaverso de Cardano, que se lanzó oficialmente como el primer Metaverso de Cardano en enero, fue nombrado en honor a Pavia, Italia, el lugar de nacimiento de Gerolamo (Jerome) Cardano en 1501. Ya hay más de 22.000 propietarios o titulares de carteras únicas de NFT.
Con un estilo similar al de Decentraland, pero basado en la tecnología de blockchain Proof of Stake (PoS), cada parcela de tierra es un NFT de Cardano (CNFT) numerada de forma única y basada en coordenadas dentro de Pavia.
Palabras Finales
La web1 era la internet de “solo lectura”. La web2, era la internet “social”. La Web3 es la internet de la “propiedad”. ¿Cómo será la Web4?.
Combina el metaverso, la cripto industria, la inteligencia artificial y el poder de la computación cuántica, y si entiendes el sentido profundo de este artículo, comenzarás a sentir escalofríos.
Una vez más, la clave es la descentralización, de lo contrario el metaverso será una herramienta para la Tecnocracia.
Como dije al principio de este artículo, no pretendo desincentivar el uso de la tecnología, sino informar sobre sus contraindicaciones, el exceso es nocivo.
No pretendo alarmarte, sino informarte.